Solo Contigo abre las puertas de su Casa – Bodega para ofrecer al visitante la opción de vivir un momento diferente en torno al vino, en la cual intervendrán todos sus sentidos. Una experiencia verdaderamente transformadora para los visitantes ya que su conocimiento acerca del vino y su modo de disfrutarlo, no volverán a ser los mismos.

Con una sala de arte que exhibe extraordinarias obras de artistas locales, la música siempre presente en todos los rincones, hermosos jardines, una decoración exquisita y las mejores vistas a los viñedos y a la cordillera de Los Andes, la Casa – Bodega reúne el ambiente ideal para relajarse y disfrutar un buen vino.

Sin embargo, esta experiencia no estaría completa sin las personas que la hacen posible: un grupo humano comprometido y que ama su trabajo. Allí reside la diferencia, en ese toque personal, único e inolvidable que únicamente vivirá quien visite Solo Contigo.